El concejal de Ciudadanos Jerez, Mario Rosado, junto al coordinador de la formación naranja, Carlos Puerto, y secretario de la Junta Directiva, Agustín Pavón, se han reunido con el presidente de la AA.VV de La Marquesa, Pedro Garrido, con el propósito de conocer cuáles son sus principales reivindicaciones en estos momentos.
La posibilidad de derrumbe y el estado de peligrosidad que presenta uno de los muros del antiguo palacio de la Marquesa es una de las denuncias que han expuesto desde la formación naranja, “desde Ciudadanos pedimos al gobierno local que actúe en la zona apuntalando el muro o vallando de forma adecuada todo el perímetro hasta su recuperación final, recordemos que este muro se encuentra en una zona de paso al colegio por lo que exigimos que se extreme la protección”, han alertado desde la formación.
En su visita al «Mirabal», tanto Rosado como Puerto han denunciado los problemas que se están originando como consecuencia de haberse convertido esta urbanización fallida en un punto de menudeo de sustancias estupefacientes y consumo de alcohol y drogas entre jóvenes, “situación que al parecer se ha dado a conocer a la policía y que desde Ciudadanos nos encargaremos de dejar constancia al gobierno municipal para que tome medidas de prevención”.
Otra reivindicación que denuncian los vecinos es el peligro de accidentes que supone encontrarse la construcción de esta urbanización en estructura vista o esqueleto de hormigón, “unas infraestructuras de libre acceso y que no cuentan con vallado ni protección alguna, nos encontramos de nuevo con una problemática similar a la que desde Ciudadanos denunciamos tanto en el Palacio de Congresos, como en Torresoto o en la calle Armas de Santiago”, ha señalado Rosado haciendo especial hincapié “en el peligro y las graves consecuencias que conlleva que los jóvenes accedan libremente a estas infraestructuras”.
Los vertidos incontrolados en la zona es uno de los asuntos que para los representantes de Cs es necesario solucionar, y es que según ha apuntado Puerto “los terrenos de esta urbanización se están empezando a utilizar como escombrera, y al igual que ha ocurrido con otras zonas recomendamos al Ayuntamiento vigilar la zona con contundencia tal y como reflejan todas las normativas existentes de medio ambiente”.